LA MISTERIOSA OBRA DE LA ESCUELA

Tío Cosme, que era el mudo del pueblo, apareció corriendo dando gritos sin ninguna discreción y además de eso era un hombre simpático y comunicativo porque ya lo tenia superado lo que es su mudez y además de eso tenía mucha moral asía gestos con las manos y conseguía charlar con todo el mundo, sin parar. Cuando los abuelos se sentaban a tomar el sol en la plaza pero el siempre el animaba la conversación porque los abuelos eran tan callados.

El tío Cosme llego corriendo dando gritos llamando la atención a todo el pueblo y queriendo enseñar algo con los gestos pero la gente no entendía lo que estaba diciendo y le preguntaron varias cosas y lo negó y le preguntaron por el tío Carmelo y le dijeron los tanques y contesto no con la cabeza hasta que vieron venir grandes maquinarias a la construcción de la escuela y la gente nadie salía de su asombro porque no lo podían creer porque los encargados de aquella escuela fueron tan intrigantes.

Y a veces nosotros las personas no somos intrigante en nuestras metas, si no que andamos comentando a toda la gente quien se cruza en nuestro camino y que tal seria si no llegáramos a esa meta nos sentiríamos como ridículos, ágamos como aquellas personas encargadas de esa escuela ellos fueron tan intrigantes y le dieron una sorpresa al pueblo y nosotros debemos de dar la sorpresa a la gente al llegar en nuestras metas.

CALLADOS NOS VEMOS MEJOR